Marruecos 2012. 5-14 octubre. 12-octubre

12-octubre

Abandonamos Erfoud, de nuevo tenemos pendiente una etapa variadísima en cuanto a terreno. Hacemos los dos grupos habituales, por un lado los “endureros”  junto con José Luis y William y por detrás Manoloboti, Rafa Haro, Cris y yo. Comenzamos en un terreno que William denomina “pista de Popeye”, un camino con mucha piedra , la vibraciones y golpes hace que termines con los brazos como el mismísimo Popeye. Tan solo llevábamos unos escasos kms recorridos cuando nos encontramos con William, había vuelto a pinchar, se queda con él Cris y Manoloboti, el grupo cabecero ha continuado y lo mismo hacemos Rafa Haro y yo.

Tras el grupo conformado por Arroyo, Cañete, Rafa y José Luis seguimos ahora el duo de Rafa Haro y yo avanzando a buen ritmo, nos vamos distanciando entre nosotros para finalmente rodar casi en solitario, Rafa iba delante, en un momento dado lo encuentro detenido tomando algo de agua y alguna barrita y me indica que siga yo en cabeza, eso hago, continuo por el track cuando tras un buen rato veo que no me sigue, me detengo y observo en la lejanía delante de mí, por una pista distinta al track, como avanza un motorista a toda velocidad, intuyo que es Rafa pero no estaba seguro. Sigo solo hasta llegar a una carretera, el track continuaba hacia la izquierda pero también hacia la derecha para llegar a la localidad de Boudenib, decido acercarme a este pueblo para  poder repostar gasolina, allí me encuentro a Rafa Haro y a José Luis, Rafa se había salido del track retomándolo más adelante, en ese momento me había rebasado sin saberlo, como él pensaba que yo iba delante corría mucho más.

Tras reagruparnos los tres, continuamos, ahora por carretera, estábamos extrañados que William, Cris y Manoloboti no nos hubieran cogido, seguro que habrían tenido alguna incidencia más. Recorremos casi 80 kms por asfalto hasta llegar a la gasolinera de Gourrama donde nos encontramos detenidos a Arroyo, Cañete y Rafa. Esperamos un buen rato hasta que aparecen finalmente el grupo trasero, no me enteré muy bien pero creo que habían pinchado alguna vez más. Todos juntos, salvo Arroyo que decide tirar por carretera afrontamos la última parte hasta llegar a Talsint. Esta, es sin duda la más entretenida de la jornada, entramos en el lecho de un río por el que seguimos bastantes kms, subiendo continuamente en altura hasta llegar a los 2000 metros. Aunque el terreno era técnicamente algo complicado lo recorremos sin ningún contratiempo. Llegando a nuestro destino tomamos por último una carretera preciosa, con unos toboganes impresionantes y un paisaje espectacular.  Ya en Talsint nos juntamos todos, incluidos Aerostato y Carlos que habían llegado por carretera en el coche.